La detección temprana de la dislexia es crucial en los primeros años de escolaridad

Cultura y espectáculos08 de octubre de 2024 Por María Victoria Klarreich

Frente al 80% de los casos que permanecen sin diagnosticar, la intervención temprana y el apoyo adecuado son clave para el éxito académico y emocional.

La dislexia es una dificultad de origen neurobiológico que impacta la capacidad de leer y decodificar palabras frente a la complejidad para relacionar los sonidos del habla con las letras y las palabras.  La OMS informó que aproximadamente 700 millones de personas en el mundo la padecen. En el Día Mundial de la Dislexia, se busca aumentar la concienciación y el entendimiento sobre el trastorno del aprendizaje.

Antes de la escuela, los signos pueden incluir dificultades para hablar, aprender palabras lentamente y problemas con rimas. Por su parte, en la edad escolar, el desafío se manifiesta con lectura por debajo del nivel esperado. El 80% de los casos permanece sin diagnosticar, lo que provoca frustración en quienes no logran desarrollar sus habilidades al ritmo de sus compañeros. 

A pesar de que se ha incrementado la identificación de la dislexia más allá de un problema aislado y con la mayor conciencia social y educativa, es necesario desmentir varios mitos. Algunas personas creen erróneamente que los niños con dislexia son “vagos”  o carecen de inteligencia. Se piensa que es un problema psicológico o madurativo, o que es simplemente el resultado de la falta de hábito de lectura. Estas falacias contribuyen a la estigmatización y dificultan la comprensión adecuada del trastorno. La dislexia no es una enfermedad ni una discapacidad intelectual, sino una diferencia en las áreas del cerebro que procesan el lenguaje. 

Según la presidenta de Disfam Argentina (la Organización Internacional de Dislexia y Familia), María Arabetti, identificar y diagnosticar lo más pronto posible permite a los niños desarrollar estrategias de compensación efectiva y evitar el dolor del fracaso escolar. “Muchos tienen funciones ejecutivas afectadas como la planificación, la organización, la anticipación y la memoria de trabajo. Estas funciones nos ponen en acción en la vida y son como la punta del iceberg que se suelen ver en el aula sin reconocer que es parte de la misma dificultad”, explicó Arabetti. La dislexia no debe ser un impedimento para el éxito. 

 Las personas con dislexia son tan inteligentes como cualquier otra persona. ¡Solo necesitan un poco de ayuda extra para aprender a leer y escribir!-1

Créditos: Elaboración propia a partir de fuentes de la web

La ley 27.306 en Argentina garantiza los derechos de los niños con dislexia al incluir su diagnóstico y tratamiento en el Plan Médico Obligatorio, Además, es fundamental formar a los docentes para que puedan detectar y acompañar a los estudiantes con dificultades específicas de aprendizaje. La escuela debe tener una doble misión de poder detectar las dificultades específicas de aprendizaje y acompañar con todas las adaptaciones necesarias. De esta manera, los chicos pueden mejorar significativamente las habilidades de lectura y proporcionar las herramientas necesarias para facilitar su proceso  académico y emocional. Para eso es necesario mayor formación y capacitación desde una mirada abierta e inclusiva.

El 8 de octubre se iluminarán monumentos y edificios emblemáticos a lo largo de nuestro país de color azul turquesa como símbolo de la concienciación sobre la dislexia. La comprensión y el apoyo pueden marcar una diferencia en la vida de quienes enfrentan este desafío para que sean capaces de desarrollar su potencial.

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