El periodismo es una “profesión peligrosa”, consideran los especialistas de la Unesco
Por: Lourdes Barrena.
Según la Unesco (Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura), en nueve de cada diez casos, el asesinato de los reporteros queda sin resolver. Además, las redes sociales también influyen en el grado de violencia que sufren estos profesionales y los inducen a la autocensura.
Debido al alto grado de impunidad de estos crímenes, en 2013, la Organización de las Naciones Unidas (ONU), declaró el 2 de noviembre como el Día Internacional para Poner Fin a la Impunidad de los Crímenes contra Periodistas. La fecha fue elegida en memoria de Ghislaine Dupont y Claude Verlon, dos periodistas franceses asesinados en Malí, África.
El barómetro de Reporteros Sin Fronteras, durante el 2022, reportó el asesinato de 46 periodistas y 508 están presos, mientras que la Unesco recogió datos de 66 periodistas muertos hasta el mes de octubre, aunque su reporte del año cerrará el 24 de noviembre.
Asimismo, el informe menciona que el 86% de los crímenes cometidos contra periodistas permanecen impunes, y que el 11% de las víctimas fueron mujeres.
Actualmente, Birmania y México son los países más inseguros para ejercer la profesión, según el indicador de seguridad de Reporteros Sin Fronteras. La Presse Emblème Campagne (PEC) anticipó que, si el ritmo de asesinatos y las condiciones políticas y sociales de México perduran en el 2023, podría haber un periodista asesinado por día.
México se mantiene año tras año como uno de los países más mortíferos del mundo para los periodistas. (Crédito: RSF).
En el país existe el Mecanismo de Protección para Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas que consiste en que todo reportero, que experimente amenazas y que esté en riesgo, puede solicitar protección. El problema es que el envío de seguridad puede tardar mucho tiempo debido a la falta de recursos y de capacitación de los que examinan el peligro que corren los periodistas. Además, hay altos niveles de impunidad y no se investigan los crímenes. La mayoría de los profesionales deben huir o refugiarse y silenciarse.
En lo que va del año, el observatorio de periodistas asesinados de la Unesco registró 18 muertes en la zona. El último desaparecido fue Roberto Carlos Flores Mendoza, de 41 años, quien fue interceptado el 20 de septiembre por un grupo de hombres mientras conducía.
“México está viviendo una etapa de extrema violencia superior a otros años y el asesinato de periodistas está vinculado al narcotráfico y al poder político”, comentó Verónica Toller, periodista y escritora argentina que reside en México.
Una investigación basada en entrevistas en profundidad con 26 periodistas latinoamericanos analizó la percepción del ejercicio de la profesión en contextos de conflicto. La mayoría estuvo de acuerdo en que las instituciones gubernamentales son ineficientes a la hora de identificar y de sancionar a los agresores. Asimismo, destacaron que las mujeres están expuestas a un mayor grado de amenazas en la cobertura de escenarios de conflicto.
Santiago Tejedor, Doctor en Periodismo por la Universidad Autónoma de Barcelona y uno de los autores de la investigación, dijo: “Son vitales las redes internacionales que permiten el apoyo, la denuncia y el respaldo a situaciones comprometidas.” Además, destacó que es necesario definir el concepto de violencia que no alude solo a escenarios bélicos.
En colaboración con la Unesco, el Ministro de Relaciones Exteriores de Austria, convocó a una conferencia el 3 y el 4 de noviembre en Viena. Allí discutirán medidas para hacer frente a la impunidad de los crímenes contra los periodistas y para protegerlos y prevenir la violencia contra ellos.
Durante el primer día, se reunirán organizaciones civiles que expondrán distintas prácticas en busca del objetivo mencionado y abordarán los problemas emergentes. En el segundo día, renovarán su compromiso con el plan de la ONU.